Tras la pandemia de covid-19, se hizo tendencia la Gran Renuncia: un fenómeno cuyas causas todavía son debatidas, pero que se caracterizó por un éxodo masivo de personas que dejaron sus trabajos. La situación llegó a un punto tan crítico que surgió el término “job-hopping” 🦘, el cual alude a los constantes saltos de empleo en empleo que puede llegar a dar una persona en poco tiempo.
Por otro lado, quizás habrás visto el hashtag “quiet quitting” en redes sociales. Este refiere a dejar de esforzarse en el trabajo e, incluso, progresivamente dejar de hacer las labores para las cuales fuimos contratados. Esto, en protesta por no ser valorados en el trabajo 😓.
Si bien retener a los talentos siempre ha sido una prioridad y un desafío para muchas organizaciones, pareciera que en la actualidad lo es aún más. Ante la situación, algunas empresas han optado por aumentar los sueldos, entregar más bonos, ofrecer horarios flexibles y facilitar el trabajo remoto.
Las anteriores son buenas estrategias, pero no satisfacen una de las grandes necesidades de los colaboradores en la actualidad 👉 la búsqueda de oportunidades de desarrollo profesional. Según una encuesta de The Execu|Search Group, el 86% de los profesionales se cambiaría de trabajo si se les ofreciera más oportunidades de desarrollo profesional.
Potencia y fideliza el talento al mismo tiempo 🤯
Para efectivamente satisfacer la necesidad de los colaboradores de desarrollarse profesionalmente, es clave implementar el aprendizaje corporativo. Este puede plasmarse en diferentes modalidades: capacitaciones, cursos, webinars, planes de entrenamiento, talleres y más. Lo importante es que se ofrezcan oportunidades de aprendizaje significativas para los trabajadores.
El aprendizaje corporativo contribuye a aumentar la confianza de los colaboradores a la hora de desempeñarse en su rol y a mejorar su vida profesional –y, por ende, su vida personal–. Promoverlo es un mensaje claro de que la organización se preocupa de sus trabajadores. Como si eso no fuera suficiente, contar con trabajadores que adquieren constantemente nuevos conocimientos y habilidades siempre será un beneficio para la empresa 💯. Es una solución doblemente buena: te permitirá potenciar el talento y fidelizarlo.
Los pilares del aprendizaje corporativo 🏛️
1. Las oportunidades de desarrollo profesional deben estar disponibles para todos los colaboradores, desde su entrada a la empresa
¿Sabías que hasta el 20% del employee turnover –es decir, el número de colaboradores que dejan su trabajo en un tiempo determinado– se da durante los primeros 45 días de trabajo? Además, según nuestro estudio Pulso Onboarding, el 50% de los trabajadores se ha planteado renunciar cuando han experimentado onboardings decepcionantes. Si bien no todos cumplen con ello, quienes sí lo han llevado a cabo ha sido en su mayoría (71,4%) por no sentirse parte de su lugar de trabajo.
Por lo mismo, es crucial que los colaboradores sepan desde el primer día que la empresa se preocupa por ellos. Esto no se trata solo de dar una primera impresión. No serviría de mucho ofrecerles oportunidades al inicio y luego no prestarles atención. El esfuerzo debe sostenerse en el tiempo. Para esto, procura que todos los trabajadores en tu empresa tengan acceso a experiencias de aprendizaje ✅.
2. Los conocimientos y habilidades útiles para la vida personal son tan importantes como las habilidades profesionales
El enfoque del aprendizaje no solo debe estar en adquirir competencias profesionales. Ofrecer oportunidades de capacitación en habilidades útiles para la vida personal no solo será un incentivo para los colaboradores, sino que también puede repercutir positivamente en su desempeño laboral 🙌. Un trabajador feliz puede traducirse en uno más productivo. Para esto, puedes poner a su disposición experiencias de aprendizaje sobre el manejo del tiempo, el autocuidado, nutrición, fitness, salud mental, entre otros.
3. Facilita el tiempo necesario para que los colaboradores aprendan
Uno de los grandes obstáculos a la hora de capacitarse tiene que ver con el tiempo del que disponen los colaboradores. No sería un gran incentivo ofrecer cursos o capacitaciones fuera del horario laboral. El ideal es que las organizaciones puedan disponibilizar tiempo dentro de las jornadas laborales para que sus trabajadores puedan aprender 🕑. Un par de horas cada cierto tiempo pueden hacer una gran diferencia y, ciertamente, eso es mejor que nada. Si esto no te convence, piensa que estás haciendo una inversión a largo plazo para tener colaboradores más hábiles y comprometidos con tu empresa.
4. Que el aprendizaje se haga costumbre
Procura que los colaboradores asocien el aprendizaje corporativo con su empresa, y no que lo consideren un evento excepcional. Para esto, trata de hacer del aprendizaje una costumbre. Ofrece oportunidades de aprendizaje con cierta frecuencia, de modo que se normalice y que los trabajadores sepan con antelación cuándo tendrán tiempo para aprender 📅.
5. Potencia todos estos esfuerzos con una cultura de aprendizaje
Una cultura de aprendizaje es una mentalidad en la que toda la organización está enfocada en aprender y mejorar continuamente. Esto implica que se valore el aprendizaje, incentivando a los colaboradores a tomar riesgos y experimentar, y aceptando que los errores son parte del proceso y que no serán castigados por ellos. Esta cultura, además, potencia la eficiencia y la innovación, la satisfacción del cliente y la retención de los trabajadores 🚀.
Teniendo en cuenta estos pilares, cada organización puede personalizar las experiencias de aprendizaje de acuerdo a lo que le haga sentido. Con esfuerzos que no requieren grandes gestiones, podemos contar con trabajadores comprometidos y motivados, y a la vez, darles razones para que continúen trabajando con nosotros en el futuro.