Capacitar y entrenar a tu personal es increíblemente importante, pero no todos los planes de entrenamiento son iguales ni deberían serlo. ¿La razón? Tal como cualquier otro plan que busque generar un impacto positivo, es vital que se consideren las necesidades específicas de los colaboradores, así como también su día a día y contexto.

¿Por qué es importante realizar capacitaciones técnicas?

Es innegable que la capacitación continua es clave a la hora de ayudar a las personas que trabajan en terreno o con aspectos más técnicos a mejorar sus habilidades, sentirse mejor preparados e incluso aumentar su motivación en el trabajo.

Por ejemplo, en el área de la construcción, un sondeo determinó que por cada 1% de presupuesto que se invierte en capacitación la productividad de los colaboradores aumenta en un 11%.

Así, contar con un plan de capacitación que pueda ser realizado en el trabajo o dentro del horario laboral de los operarios da la oportunidad de satisfacer las necesidades profesionales de los trabajadores, mejorar su motivación y también la productividad.

¿Cómo ayuda a la prevención de accidentes?

La capacitación, por supuesto, no solo es una muy buena herramienta a la hora de mejorar la motivación o disminuir la rotación laboral. También ayuda a proteger de accidentes, a través del conocimiento, a aquellos colaboradores que muchas veces pueden verse más expuestos. Piensa en los operarios que se encargan de reparar la electricidad, cargar gas y tantas otras ocurrencias del día a día. 

Si tus operarios manejan sustancias u objetos que pueden ser peligrosos, es clave que aprendan a manejarlos antes de comenzar a trabajar y que se actualicen sobre su uso. Sin embargo, mientras más demore la capacitación o la nueva certificación, más tiempo tomará incorporarlos a la fuerza laboral, o peor aún, se podría considerar apropiado invitarlos a desempeñarse sin el conocimiento adecuado.

¿Por qué es importante?

La capacitación en terreno o sobre temas técnicos también puede ser correctiva y ayudar a solucionar problemas de desempeño que han sido previamente diagnosticados. Por ejemplo, si tus operarios se encargan de dar asistencia en terreno a tus clientes, pero se ha determinado que la calidad del servicio ha bajado, es importante investigar las causas y, posteriormente, volver a capacitar a tus trabajadores para que puedan entregar un mejor servicio.

En ambos casos el entrenamiento y la planificación de un plan de capacitación específico cubre necesidades que, de no ser atendidas, podrían dañar a los colaboradores y también a la salud del negocio.

Al final del día, entregar una capacitación técnica de calidad nos permite darle acceso a los colaboradores a las herramientas y conocimientos necesarios para que puedan tomar mejores decisiones, trabajar mejor y entregar un mejor servicio.

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