Toda empresa quiere tener profesionales de excelencia dentro de sus filas, lo cual es lógico si consideramos que son ellos el talento y la fuerza de trabajo que hace a una empresa crecer y ganar competitividad. Sin embargo, muchos líderes aún piensan que el desempeño profesional de sus colaboradores se mejora simplemente asignando tareas y supervisando de forma rigurosa, pero finalmente se llevan mucha frustración al no obtener los resultados esperados. Y es que esto no es algo que ocurra de la noche a la mañana adoptando un par de medidas, sino más bien, es un proceso que se desarrolla de forma progresiva e involucra tanto a los profesionales como a la cultura de la organización. En este artículo, te invitamos a reflexionar sobre tres principios clave para pulir y hacer brillar el talento de tus colaboradores para beneficio tanto de ellos mismos, como de toda la organización.
¿El talento se hace o se nace? Todo profesional tiene talentos y habilidades innatas, pero éstas sólo se expresan y alcanzan su verdadero potencial cuando son formadas y desarrolladas adecuadamente. Por tanto, el primer principio fundamental para obtener colaboradores con un óptimo desempeño profesional es proporcionar los medios para que esto suceda. Lo interesante de este punto, es que la mayoría de los colaboradores están plenamente conscientes de esta necesidad que tienen y, por tanto, buscarán establecerse en un lugar que les brinde esta posibilidad de crecimiento. De esta forma, implementar estrategias de formación y desarrollo profesional mejorará tanto la productividad como la retención de talento. En otras palabras, priorizar el desarrollo de los profesionales no será una medida para simplemente obtener lo mejor de ellos, sino que además les dará un crecimiento que agradecerán entregando su fidelidad, compromiso y permanencia dentro de la organización.
Desarrollar una cultura de aprendizaje es un proceso que involucra a toda la organización. Se trata de que todos sean conscientes de la necesidad de un aprendizaje y crecimiento continuo y de crear una cultura que lo respalde. La cultura del aprendizaje es fundamental para que una empresa se sostenga en el tiempo ya que otorga mayor resiliencia y adaptación a los cambios, al tener un ecosistema de colaboradores interconectados que funcionan como una gran familia en crecimiento y no como individuos separados. Además, una organización que promueve el aprendizaje como eje central de su cultura, genera ambientes motivantes y colaborativos, dando espacio para la innovación, creatividad y modernización de operaciones internas.
En la era digital super tecnologizada, es normal encontrar organizaciones que adoptan planes de capacitación online o e-learning que se ofrecen en internet sin meditarlo mucho. Naturalmente, estos cursos ofrecen entregar contenidos, capacitar y mejorar las habilidades de todos los colaboradores, sin embargo, muchas veces nos encontramos con una triste realidad. La mayoría de los cursos online tienen una alta tasa de deserción, y esto se debe principalmente a que no cumplen con la calidad o son lo suficientemente aburridos para que incluso un profesional en busca de formación decida abandonarlos. Frente a esto, es importante ser riguroso en verificar que sean metodologías de aprendizaje efectivas y comprobadas. Descuidar este punto y adoptar cualquier tipo de curso para los profesionales podría generar más de un dolor de cabeza tanto para los colaboradores como para el liderazgo. Esto se debe a que un curso de mala calidad, puede perjudicar la motivación y el compromiso de un talento profesional ya que sentirá que no se les valora lo suficiente.
En resumen, la clave para asegurar un óptimo desempeño profesional de los colaboradores consiste en proporcionar un desarrollo profesional constante, dentro de una cultura que lo respalde, mediante los medios apropiados. De esta forma, no solamente contarán con las capacidades para un óptimo desempeño profesional, sino que además se sentirán valorados y decidirán voluntariamente entregar lo mejor de sí mismos al cumplimiento de metas. En el fondo, deben sentir que el lugar en el que se encuentran trabajando es, sin duda, el mejor lugar en el cual podrían estar para sacar a relucir todo su potencial. Afortunadamente, hoy existen innovadores sistemas de capacitación digital con metodologías efectivas y estudiadas que entregan un aprendizaje real y motivante. Estas metodologías tales como la Gamificación, el Microlearning y el Adaptive learning, son lo último en tendencias y sin duda son medios que pueden hacer la diferencia entre un profesional de excelencia comprometido con la organización y uno a punto de irse con la competencia.