La transformación digital es algo que hace años venía avanzando a paso firme y la pandemia actual ha entregado el escenario para dar paso definitivamente a la “nueva era digital” del mundo. Esta nueva realidad incluye un hiper acelerado avance de nuevas tecnologías y es necesario que las empresas estén atentas a las innovaciones para aprovechar estos beneficios y no quedarse atrás. Digitalizar los procesos de forma estratégica e incorporar metodologías ágiles y efectivas es esencial para mejorar la productividad y ganar competitividad. Pero, ¿se han detenido en tu empresa a considerar los efectos que tiene esta digitalización sobre el clima laboral?
Sin embargo, no todo lo que brilla es oro y, en este contexto hiper tecnologizado, es necesario ser muy prudente al incorporar cambios al sistema de trabajo. A veces las tecnologías y nuevas metodologías que se muestran en el mercado pueden verse súper maravillosas y sin pensarlo dos veces las incorporamos al sistema de trabajo sin tomar en cuenta las consecuencias que pueden tener en los colaboradores. Esto puede resultar en que se descuiden aspectos tales como la salud mental, estrés o riesgos psicosociales que en definitiva terminan deteriorando el delicado clima laboral. Finalmente, el beneficio que pensábamos obtener al incorporar esas nuevas tecnologías termina perjudicando otros aspectos de la organización y lo resultante es un sistema contraproducente que afecta a los colaboradores y reduce la productividad. Pero, ¿por qué pasa esto?
La transformación digital promete mucho y en general podemos decir que ha traído muchos beneficios en eficiencia, competitividad y productividad a las empresas. Sistematización de procesos y conectividad hacen que toda la empresa tenga un flujo de información mucho más expedito y eficiente. Sin embargo, hay un detalle que no debemos pasar por alto, aunque los procesos, plataformas y softwares funcionan con una Inteligencia artificial, es decir, robotizados, no debemos olvidar que nosotros mismos no somos robots.
El ser humano tiene sus propias necesidades psicosociales y emocionales, lo cual ha quedado en evidencia justamente a causa de esta pandemia. La incertidumbre frente a la situación sanitaria, el confinamiento, el acostumbrarse al teletrabajo y a la digitalización completa de nuestros sistemas de trabajo son algunos de los elementos han afectado el ánimo y la motivación de los trabajadores. ¡De hecho, se han publicado muchos reportajes sobre ello!
En este contexto, la sobre exposición a medios digitales puede pasar la cuenta. No podemos pasar todo el día frente a un computador y no sentir un desgaste psicológico y estrés mental. Por tanto, es importante considerar esa sobrecarga a la que están expuestos los colaboradores y además agregar a eso, charlas, conferencias, videollamadas y cursos e-learning extras. Esto sería simplemente, una bomba de tiempo en la salud mental, motivación y, en definitiva, perjudica todo el clima laboral. ¡Más, no es mejor! Por esta razón no es de extrañarse que los cursos online que comenzaron a principio de año con una alta demanda presentan una alta tasa de deserción.
Lo bueno, es que nunca es tarde para descubrir este inminente riesgo antes de que se vuelva un problema mayor. La clave para prevenir el deterioro del ambiente laboral y los riesgos psicosociales reside en la organización y la gestión del trabajo, prevenir las consecuencias es mejor que reaccionar una vez que ya se han producido. En este sentido, el consejo clave para mantener un clima laboral saludable es, primero que todo, no sobrecargar a los colaboradores con medios digitales. Aquí te dejamos algunos consejos adicionales.
Mantén activas las relaciones entre colaboradores. Mantén reuniones constantes, pero no para hablar solo de trabajo. Celebren los cumpleaños, incorpora a los nuevos con una bienvenida, recuerden juntos la cultura de la empresa y si alguien tiene una necesidad especial intenten apoyarlo como equipo.
Procura que tus colaboradores cuenten con los equipos necesarios. No esperes a que te den licencias médicas por tendinitis, jaquecas o problemas en la columna. Incluso si los trabajadores están desde casa, procura que tengan los implementos adecuados para un desarrollo de labores óptimos, sillas, escritorios, un buen computador, etc.
Cuidado con los cursos online excesivos. Piensa dos veces antes de planificar un programa con largas y densas charlas, reuniones y cursos de capacitación online. No vaya a ser que por intentar hacer un bien, termines desanimando o estresando a todo el grupo.
Hoy en día, existen nuevas y estudiadas tecnologías y metodologías de capacitación entretenidas y de baja exposición que no saturan al usuario, tales como la Gamificación y el Microlearning. Si no nos crees, investiga, date una vuelta y conversa con tus colaboradores sobre este tema, nosotros estaremos por aquí esperándote.